Cuentan que en aquel tiempo
romerempo yerbabuempo escaramujempo
estaba una chiquilla
romerilla yerbabuenilla escaramujilla
meciendo a su muñeca
romereca yerbabueneca escaramujeca
cuando la oyó llorar
romerar yerbanuenar escaramujar
con vocecita enferma
romererma yerbabuererma escaramujerma.
Y no calló la boca
romeroca yerbabuenoca escaramujoca
hasta que vino el médico
romerédico yerbabuenédico escaramujédico
y la obligó a comerse
romererse yerbabuenerse escaramujerse
un caramelo rosa
romerosa yerbabuenosa escaramujosa
que sanó su barriga
romeriga yerbabueniga escaramujiga
Poema de Miquel Desclot
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.