El cuidado de la piel constituye una oportunidad para realizar un tratamiento gratificante que no se rejuvenezca. Nada mejor que emplear sus propios productos caseros para procurarse una auténtica sensación de bienestar.
Crema hidratante para la noche
A medida que vamos envejeciendo, la piel se va secando y precisa cuidados regulares. Los aceites de jazmín y de rosa contribuyen a que recupere la hidratación, mientras que el olíbano reduce las arrugas y devuelve el tono a los músculos flácidos.
Ingredientes:
- 50 g. de crema base sin perfume, en un bote con tapa hermética
- 3 gotas de aceite esencial de rosa
- 2 gotas de aceite esencial de olíbano
- 1 gota de aceite esencial de jazmín
Añada los aceites a la crema y mézclelo bien todo. Aplíquese un poco de crema antes de acostarse.
Jabón de lavanda y de aceite de oliva
Utilice jabón puro de aceite de oliva, de buena calidad, para elaborar este delicioso jabón casero. Enriquézcalo con otros aceites y aromatícelo con lavanda para obtener un suave y rejuvenecido en limpiador.
Ingredientes:
- 175 g. de jabón de aceite de oliva, de buena calidad
- 25 ml. de aceite de coco
- 25 ml. de aceite de almendras
- 2 cucharadas soperas de almendras molidas
- 10 gotas de aceite esencial de lavanda
Ralle el jabón y póngalo al baño maría, para que se vaya derritiendo a fuego lento. Cuando adquiera la consistencia de una pasta suave, añada el resto de ingredientes. Remuévalo todo hasta que los ingredientes estén bien mezclados y obtenga una pasta uniforme. Vierta la pasta en molde untados con aceite y déjela reposar hasta el día siguiente. Desmolde y decore cada pastilla de jabón presionando la parte superior en una bandeja repleta de brotes de lavanda.
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