Aunque
se ha considerado al stress como una enfermedad de la vida moderna,
lo cierto es que no solamente en las sociedades industrializadas o
los llamados ejecutivos, padecen tan compleja enfermedad.
Toda
persona, en el transcurso de su vida, se ve sometida a unas presiones
exteriores motivadas por su medio familiar y laboral, durante las
cuales su sistema defensivo trata de acomodarse y soportar los
múltiples inconvenientes que le llegan. Se considera que padece
stress cuando las tensiones son muy prolongadas y el organismo se ve
incapaz de asimilarlas. Sería algo así como una conducción
eléctrica calculada para 500 watios, a la cual se le incorporan
pequeñas sobrecargas adicionales. Durante un corto espacio de tiempo
se puede soportar, pero si no existen derivaciones para canalizar el
exceso vendrá el fallo.
Lo
curioso del stress es que la persona afectada apenas lo percibe y que
su rendimiento físico es muy alto, consecuencia lógica de un cuerpo
obligado a funcionar al máximo. Esta sobrecarga de trabajo o de
tensión emocional quizás sea beneficiosa durante cortos períodos
de nuestra vida, ya que nos pone en funcionamiento facultades y
energías quizás desconocidas para nosotros mismos. Solamente
aquellas personas a las cuales la vida les somete a estos esfuerzos
son capaces de efectuar actos de verdadero interés.
Pero
el problema aparece cuando la tensión es demasiado prolongada y las
reservas energéticas comienzan a decrecer. El sistema adaptógeno de
conducción nerviosa, acusa sobrecarga y trata de adaptarse subiendo
la tensión arterial, aumentando la irritabilidad emocional o con un
exceso de jugos gástricos. Estas anomalías conducirán a la larga a
una serie de enfermedades que pueden abocar en una muerte súbita,
justo cuando la persona padecía pletórica de eficacia y energía.
REMEDIOS:
El remedio para evitar el stress pasa por la búsqueda de alternativas o descansos periódicos. Si cada persona desarrollase actividades al margen de su trabajo (eso que se le denomina Hobbys), hiciera deporte moderado no competitivo, no tomara excitantes, durmiera un sueño reparador, viajara más a la montaña que a la playa y tomara una alimentación saludable, podría soportar con facilidad las múltiples tensiones que la vida en las ciudades provoca.
El remedio para evitar el stress pasa por la búsqueda de alternativas o descansos periódicos. Si cada persona desarrollase actividades al margen de su trabajo (eso que se le denomina Hobbys), hiciera deporte moderado no competitivo, no tomara excitantes, durmiera un sueño reparador, viajara más a la montaña que a la playa y tomara una alimentación saludable, podría soportar con facilidad las múltiples tensiones que la vida en las ciudades provoca.
Existen
muchas hierbas que pueden ayudar a mejorar un organismo sobrecargado
y entre ellas tenemos al Eleuterococo, el Espliego, el
Romero, la Melisa y la Valeriana.
Otras
ayudas importantes las podemos conseguir tomando adaptógenos como el
polen, la vitamina B-15, la Jalea real y la
vitamina B-1. El Oligoelemento Manganeso, el Zinc-cobre
y el Selenio, ayudarán a fortalecer el organismo.
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